Algunas veces el aire frio me recuerda
Una mañana ya algo perdida
Una flor marchita, un vidrio empañado
Un resto de un recuerdo ahora olvidado
Con esfuerzo reconstruyo mi aura
Durante el día hasta que esta se restaura.
Mi sangre a fluir, mi corazón me empuja
Con violencia mi ánimo no amuerma.
Del silencio la vida brota como gotas
Lejanas y al mismo ligadas cada una de otra.
En un mismo chubasco, frio pero que hace renacer.
Triste en su parecer pero bondadoso en su obra .
El ánimo fluye, el corazón palpita
Así esta vida efímera nunca se agota.
Flujo caótico, brusco y asaz grande
Mientras abro los ojos lentamente
Y observo una vez mi mundo abrirse
Todo comienza una vez más.
Y pese a que las palabras estén perdidas
Sigo aquí mirando lo que me queda,
Lo que tengo y lo que deseo firmemente será.
Nunca llama la playa
La niña es visible
En la belleza que sostiene
Ver biografia